Fumar no es tan fácil como todo el mundo, incluso los fumadores creen, no es simplemente encenderse el cigarro y darnos unas cuantas caladas hasta llegar al filtro y tirarlo, si no que el proceso suele costar un poco mas, os voy a explicar el porque.
las primeras partes del proceso son quizás las mas difíciles, en primer lugar, el sujeto fumador tendrá que buscar un acompañante que a ser posible sea fumador, porque si no se aburrirá en exceso.
Una vez escogido el compañero de hazaña y de habernos situado en el lugar oportuno para fumar, que como ya sabéis con este nuevo año 2011 está un poco complicado, procederemos a buscar a nuestra presa para así, pedirle un cigarro, que por supuesto será la misma presa a la que pediremos un mechero para encenderlo, porque casualmente a ti se te ha acabado el gas.
Por fin, después de este duro proceso para conseguir un cigarro, pasaremos a fumárnoslo en sí. La primera calada siempre será la mas larga y profunda, sin olvidarte, por supuesto, de echarle el humo en la cara justamente a la persona que no fuma, que muy educadamente te dirá: ''no fumo gracias...'' y tu dirás: '' a lo siento...'' con una sonrisita en la cara que refleja tu pensamiento de '' jodete'', además, después haciendo que no te das cuenta colocaras el cigarro de tal manera que el humo se dirija a la cara del sujeto que te acaba de advertir.
Ahora supongamos que por casualidad tienes la suerte de tener una cajetilla de cigarros tuya, repito, tuya porque si alguien viene a pedirte un cigarro, como tu haces cuando no tienes y te dan muy amablemente, tu dirás: ''... no, lo siento no me quedan, era el ultimo...'' o '' ...no, lo siento me lo han dado...'' todo esto poniendo una cara de no haber roto un plato en tu vida.
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